30 Nov Por el traje se conoce al personaje, gracias a Nerea Torrijos
Zoe Montilla
Este sábado hemos contado con la presencia de Nerea Torrijos, ganadora del premio Goya a mejor diseño de vestuario por su película Akelarre.
Sin embargo, ese filme no es la razón por la que hoy nos acompaña, sino que se trata de su excelente trabajo en Irati. Irati es un romance fantástico dirigido por Paul Urkijo (con el que también contamos, pero esa es una historia para otro artículo), lleno de detalles y una dirección en los atuendos merecedora de cierto premio ya mencionado, aunque finalmente se quedó a las puertas con una nominación.
Irati se ambienta en la “selva de Irati” —nombre sorprendente, ya que es un bosque— en el siglo VIII. No os asustéis por estos datos, se trata de una película de fantasía, como es costumbre en el FANTAELX. Se basa tanto en la historia como en la mitología vasca, así que adecuar el diseño de decorados, maquillaje y vestuario fue todo un desafío. Sin más dilación, para responder todas nuestras dudas, Nerea Torrijos:
P: ¿Cuál ha sido el mayor reto en el diseño de vestuario de Irati?
R: El mayor reto ha sido poder encajar una película tan complicada con el presupuesto que teníamos porque las pelis nunca tienen el presupuesto que se necesita, aunque parezcan muy grandes. Para mí fue un reto tener que hacer una peli tan compleja con el dinero que teníamos para hacerla, pero lo conseguimos. Me ayudaron mucho las personas que trabajan conmigo, los proveedores que tengo… Tuve suerte de que me apoyaran para poder sacarla. Otro reto que fue difícil al principio fue el vestido de Mari, porque es el más laborioso y el que más cuesta hacer, porque es una cosa artesanal. Estuvimos con una chica que iba haciéndolo ocho horas al día durante un mes. Entonces ese fue más un reto de tiempo, de encajarlo para que quedara bonito. Otra complicación fue el poder hacer que el vestuario de Irati cumpliera los requisitos de histórico, pero también fantástico, porque, aunque nosotros estemos haciendo una peli histórica, también estamos estilizándola para darle un look más fantástico, como quiere mi director. El completar ese elenco de personajes y ver a esos actores a través del vestuario también era un reto: poder conseguir verosimilitud dentro de la estilización.
P: ¿Qué recurso es más importante en tu área? ¿El dinero o el tiempo?
R: Para hacer una peli siempre se necesita tiempo suficiente para poder desarrollar el trabajo, sobre todo cuando es artístico: los procesos son más lentos, no es lo mismo que cuando ya estás rodando: “que hay que poner esto así”, “hay que ambientarlo así”, “hay que atarlo así” o “hay que colocar aquí un foco”… Eso es más inmediato y es la técnica. Pero los procesos creativos llevan más tiempo porque no siempre estás inspirado. Se necesitan siempre ambos: tiempo y dinero. Pero yo digo que, si no se tiene tiempo, hay que compensarlo con dinero, porque si te faltan manos porque no llegas en ese tiempo necesitas más manos. Si necesitas hacer algo y no tienes 7 semanas, tienes 3, necesitas más dinero para hacerlo más pronto, más rápido. Es un intervalo entre las dos: o tiempo o dinero, y cuando no se puede tener una hay que intentar compensar con la que sí se tiene.
P: De los tres trabajos por lo que se te ha nominado a los premios Goya como mejor diseño de vestuario (20.000 especies de abejas, Irati, o la ganadora, Akelarre), ¿cuál consideras que es tu mejor trabajo?
R: Irati. En Irati me siento muy realizada como diseñadora de vestuario, lo que no quiere decir que en las otras no: en el caso de “las abejas” me siento súper orgullosa de haber podido hacer una peli tan bonita y poder haber contado la historia de Lucía a través de sus ropas. Para mí fue un regalo esa película y todo lo que vino después. Pero sí que es verdad que es mucho más sencillo hacer una película actual: es más asequible el ir a hacer compras o el tener a mano cosas que puedan ayudarte a contar quién es esa personita, en contrapunto a las pelis históricas. La diferencia entre Akelarre e Irati es que en Akelarre mi libertad creativa no fue tan plena como en Irati. Lógicamente, yo trabajo para mis directores y yo siempre tengo que darle a mi director lo que quiere. En el caso de Paul, es una persona que tiene una iconografía muy clara de lo que está contando, los colores muy claros… Confía mucho en mi trabajo y me ha dejado abrirme y desarrollarme. La diferencia para mí es en riqueza. Irati tiene mucho más color, mucho más personaje, mucho más vestuario… Además, es un vestuario que he podido hacer de una forma muy artesanal: cosiéndolo de cero. Lo cosimos casi todo a mano, elegía telas en tonos naturales y los teñíamos en el tono que queríamos para la peli, exactamente en el tono que querían Paul y nuestro director de foto. A nivel de realización, es más exigente, pero yo me he sentido mucho más realizada, y en el resultado me parece que salta a la vista, es mucho más espectacular.
P: ¿Cómo comenzaste a trabajar con Paul Urkijo?
R: Yo llevaba poco tiempo haciendo cosas, había hecho algunos cortitos (tres o cuatro cortos). De repente, me llamaron por teléfono para ofrecerme una “publi”, una que dirigía Paul. Así le conocí, hace casi… Bueno, hace ya 12 años. Hemos hecho muchos proyectos juntos. Le conocí porque me ofrecieron un puesto de trabajo en su equipo porque la persona que iba a hacer el vestuario antes, por lo que fuera, no pudo hacerlo, así que ahora era yo.
P: Tu trabajo es súper variado, hemos visto de todo: fantasioso, moderno, histórico… ¿Qué otro tipo de vestuario te gustaría desarrollar?
R: Me encantaría hacer algo futurista, de ciencia ficción, tipo El quinto elemento, Dune… Cosas así. Y me encantaría hacer griego clásico o egipcio, algo clásico y espectacular, como estas pelis de las de antes, de Hollywood, en las que tienes a Cleopatra… Me encantaría hacer o algún mito griego o algo donde podamos jugar con la historia. Me encanta hacer fantástico, pero me encanta lo histórico. Entonces, me gustaría hacer una peli como Napoleón, en la que tienes que ceñirte mucho a la realidad y hacer algo espectacular y cuando veas el resultado de tu trabajo parezca que estás viendo un cuadro.
P: ¿Qué época, en cuanto moda, te interesa más?
R: Me encanta todo de época. Yo disfruto muchísimo con cualquier vestuario o con cualquier época de la moda en la que yo pueda ver los cambios, los cuales existen desde que el ser humano es ser humano. No tengo una época “perfecta”, pero me encanta el Barroco, el Renacimiento, el “medievo” (con todo lo que conlleva). Sí es cierto que, en toda la época moderna, creo que, se está perdiendo un poco el protocolo, la elegancia y yo lo puedo mantener en mis pelis cuando tengo que trabajar y tengo la suerte de poder verlo. Pero no es “cuál me gusta más”: me gusta, en general, la historia de la moda porque me parece súper interesante. Me gusta mucho cualquier cambio que se haya hecho siempre a favor de las mujeres en el mundo de la moda: quitar el corsé, poner un pantalón, Chanel… La moda en sí es una historia y va acompañando a la propia historia. Lo que me gusta menos, sí te podría decir, que son las épocas modernas. Parece que hace tiempo que no hay una intencionalidad. Sí que todos expresamos nuestra personalidad a través de la indumentaria, a día de hoy también, pero antes había códigos: tú te encontrabas con una persona y viendo su ropa, su color de tocado, su tipo de tejido… Sabías de dónde venía, a dónde iba. Eso me parece muy interesante. Esto me pasa porque, como digo, me encanta la historia. Me encanta investigar.
P: ¿Qué te inspira y motiva?
R: Me inspiran muchas cosas, lo que más: el arte. Yo a la hora de hacer una peli tengo que buscar la inspiración para motivarme, como cualquier artista, entiendo. A mí me encantan el arte, los museos, la historia… Me gusta mucho la gente joven. Me motiva mucho y me inspiran los nuevos diseñadores a nivel internacional y las nuevas propuestas que están haciendo. Sobre todo, cómo abrazan el tema del ecologismo, de la reutilización de la ropa. Me encanta ver que haya chavalitos jóvenes —porque yo ya tengo 39 años— que tengan propuestas tan interesantes a la hora de vestir. Como te hablaba antes de la desmotivación con lo actual, también me motiva mucho el ver que hay una nueva forma de ver la moda súper bonita por parte de la gente joven. Eso me da mucha inspiración.
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